Construir una sauna en casa

Cuando decidas construir un sauna, puedes contar con una variedad amplia de opciones en diseños, localizaciones, materiales y fuentes de calor.

5 OCT 2010 · Lectura: min.
El primer paso para colocar una sauna en tu hogar es saber cuál será su lugar

Hoy en día, la industria ha progresado inmensamente en diseño y construcción con calidad.

El primer paso es buscar el lugar donde puedes construir la sauna. Si es en el interior de la casa, cualquier área de más o menos cincuenta metros cuadrados esta muy bien, pero si deseas construir una sauna exterior, lo primero que debes revisar son las leyes locales para averiguar las normas que se deben cumplir.

El segundo paso es construir las paredes, el tablero del piso y el techo para tu sauna. Es mejor si usas madera. Recuerda que debes dejar alrededor de 15 centímetros de espacio debajo del piso para las instalaciones eléctricas y otros detalles.

El tercer paso viene una vez puestas las paredes del sauna. Debes crear al menos dos respiraderos para la salida del aire, uno debe estar colocado en la parte de arriba del calentador para reducir los gases peligrosos. Toda la iluminación que deseas añadir en la sauna debe ser instalada en ese momento. La apertura para una puerta también debe quedar lista.

En cuarto lugar, debes cubrir el interior de la sauna con una capa de fibra de vidrio de 7 cm, para aislarlo aún más. También puedes cubrirlo con madera de cedro. Además, este es el momento para instalar la puerta.

Como quinto paso, debes comprar un caldero específico para sauna. Vienen en diferentes modelos y tamaños. Uno de 1 kw será capaz de calentar un sauna de cincuenta metros cuadrados, uno de 2 kw puede calentar uno de cien metros cuadrados y así sucesivamente. El caldero puede ser muy difícil de instalar por lo que te aconsejamos que cuentes con la ayuda de un electricista para mantener tu sauna segura.

Asimismo, se han de cumplir unas pautas de seguridad. La puerta debe abrirse siempre hacia fuera, asimismo, el uso de la sauna debe ser limitado a ciertos individuos. Por ejemplo, mujeres embarazadas o personas con presión arterial baja o alta y otras condiciones, deben consultar a su doctor antes de usar una sauna. Asimismo, las saunas son peligrosas para aquellos que están bajo la influencia del alcohol o de drogas.

Foto: Europoolshop S.L.

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