Ofrécele a tus clientes las mejores piscinas del mercado
Artículo revisado por el Comité
El mercado de las piscinas ofrece actualmente multitud de posibilidades para adaptarse, no sólo a las condiciones de espacio o las necesidades de cada cliente, sino también a todos los gustos. Los profesionales del sector deben conocer, por tanto, las técnicas de instalación y los modelos disponibles para ofrecer siempre el mejor servicio.
Poco a poco el invierno llega a su fin y, por tanto, llega la temporada para que muchos propietarios se planteen la instalación de una piscina en su jardín. Es entonces cuando comienzan las dudas sobre qué tipo de piscina es la mejor, cuál se adecúa a las necesidades de espacio, cómo es el terreno sobre el que se va a construir y, sobre todo, qué piscina es la más recomendable para minimizar los gastos tanto de creación como de mantenimiento.
Por ello, las empresas de piscinas deben contar con buenos profesionales que sepan asesorar correctamente a los clientes tomando como base el conocimiento general del sector y, por supuesto, realizando estudios personalizados de cada uno de los casos.
Una vez dado este paso, llega el momento de buscar la forma, la profundidad y el tipo de piscina que mejor se adapte a cada cliente. En términos generales, hay que tener en cuenta, por ejemplo, que el área mínima recomendable para la instalación debe ser de 8x3 m. ya que, aparte de las dimensiones que ocupa el vaso hay que prever, entre otros, el espacio de la depuradora.
Igualmente, no se debe olvidar realizar los trámites burocráticos pertinentes, sobre todo si la piscina requiere algún tipo de obra. En estos casos, hay que presentar un proyecto técnico en el Ayuntamiento para obtener la licencia municipal de obras –que confirmará que el terreno es legalmente edificable, que las distancias de la instalación tanto a la linde vecinal como al vial son las exigidas y que las conexiones de los desagües están normalizadas, al igual que la instalación eléctrica-.
A partir de ahí, los sistemas de construcción más habituales que se suelen ofrecer son:
- Piscinas prefabricadas: Se presentan normalmente en monobloque y son muy resistentes y fáciles de instalar. Las más habituales son las de tipo líner y las de poliéster y acero.
- Piscinas de obra: Pueden ser de hormigón tradicional o de hormigón proyectado –especialmente empleado en caso de piscinas complejas porque no hay que realizar encofrados de madera-.
- Piscinas desmontables elevadas: Se ubican directamente encima del suelo, por lo que no requieren ningún tipo de obra y pueden desmontarse siempre que sea necesario. Se presentan modelos autoportantes, de madera, tubulares o de banda rígida.
- Sistema mixto: Combina las estructuras de las piscinas prefabricadas con las de obra, ya que se crea con paneles perimetrales unidos con la forma y las medidas de la piscina.
Foto: Infinitipool