Cubiertas: imprescindibles para maximizar el uso de la piscina
Artículo revisado por el Comité
Las cubiertas son los complementos ideales para las piscinas, especialmente cuando se busca poder hacer uso de ellas durante todo el año. La diversidad de modelos que existen permiten encontrar aquella que se adapte perfectamente a casi cualquier necesidad e idea de diseño.
Instalar una piscina es, sin lugar a dudas, una decisión que se toma no sólo para disfrutarla en el presente, sino como inversión a medio y largo plazo. Por esta razón, debe valorarse seriamente la posibilidad de instalar también algún tipo de cubierta que maximice el uso de la piscina, tanto en invierno como en verano, y que permita que el agua se conserve en buen estado durante más tiempo para, además, ahorrar en gastos de mantenimiento –limpieza, vaciado y llenado del vaso, etc.-
Existen multitud de modelos y diseños que, en algunos casos, pueden personalizarse casi por completo para adaptarse tanto a los gustos como a las necesidades de los clientes.
Por ello, es necesario analizar diversos elementos y dejarse asesorar por los profesionales para encontrar la estructura que más convenga acorde con, por ejemplo, el espacio que se disponga, las condiciones climáticas de la zona –se realizarían instalaciones concretas con materiales más resistentes- o la utilidad real que quiera dársele –para proteger la piscina en cualquier época, sólo para cubrirla durante la época invernal, para evitar accidentes fuera de temporada, etc.-
Los tipos de cubiertas que existen actualmente en el mercado son:
- Cubiertas telescópicas: Están formadas por varios módulos que van encajando unos dentro de otros al deslizarse, con unas pequeñas ruedas o sobre raíles, en una estructura fija de aluminio. Los paneles suelen estar fabricados en polimetacrilato o policarbonato y pueden ser ahumados, transparentes o completamente opacos, aunque siempre reciben un tratamiento anti UV para proteger el interior.
- Cubiertas de techo móvil: Se caracterizan porque la parte superior puede extraerse o desplazarse tanto manual como automáticamente. Es conveniente retirarlas cada cierto tiempo para renovar el oxígeno del interior y evitar la condensación del agua.
- Cubiertas de globo: Son estructuras de tipo hinchable formadas por una lona que se mantiene con la presión correcta para que se quede siempre tensa. Garantizan la estanqueidad gracias a unos tirantes que la sujetan firmemente al suelo.
- Cubiertas murales: Se trata de estructuras que pueden plegarse completamente durante el verano y mantenerse fijas en invierno. Se diferencian del resto en que el techo puede retirarse de forma independiente a los murales laterales, lo que amplía las posibilidades del baño.
Todas ellas están, además, pensadas para no requerir de un mantenimiento especialmente complicado, aunque conviene, por ejemplo, limpiarlas de manera regular con productos respetuosos, sobre todo en su estructura.
Igualmente, se recomienda aclarar bien la cubierta antes de comenzar con la limpieza jabonosa para evitar que el polvo pueda rayar los paneles. También es necesario asegurarse de que una vez realizada la limpieza no queden restos de espuma y, finalmente, se debe aplicar un tratamiento preventivo para evitar la aparición de moho.
Foto 1: Tecnicover
Foto 2: Piscinas Tomelloso